La pequeña Milagros nació sin piernas y su familia ruega por una casa digna

Recorre toda la casa con una soltura notable, apoyada en sus manos y la mirada siempre atenta de sus padres, que la controlan pero la dejan hacer. Milagros Guadalupe Cabrera tiene 4 años y nació sin piernas, pero despliega una energía que sorprende y conmueve.

Este año comenzó el jardín de infantes en Escuela 304 y se adaptó sin inconvenientes. “La única diferencia con los otros chicos es, que como ella no puede ir solita al baño y por ley los docentes no pueden acompañar a los chicos, mi señora se queda toda la tarde por si quiere ir al baño”, comentó su papá, Carlos Cabrera.

Los especialistas que atienen a la pequeña insisten con la necesidad de contar mejoras habitacionales para optimizar su calidad de vida, ya que su vivienda actual es de madera y todo el perímetro tiene piso de tierra. En ese contexto, las abundantes lluvias de las últimas semanas generaron humedad e inconvenientes de salud. 

La familia reside en Villa Falk y hace más de dos años comenzaron a tramitar una casa ante el Instituto Provincial de Desarrollo Habitacional (Iprodha), tanto ante la sede local como en Posadas, donde obtuvieron mayores respuestas. Al respecto, Cabrera comentó que trabaja como albañil y gana lo justo y necesario para alimentar a su familia, por lo que no está en condiciones de afrontar el pago de un alquiler.

“Hace un tiempo la Municipalidad nos cedió un terreno y el Iprodha dice que nos va a construir una casa ahí, porque no hay más cupos en los barrios de viviendas. Pero pasan los meses y no tenemos novedades”, lamentó. 

A pesar de la reducción de sus extremidades, la pequeña lleva una vida normal y sus progenitores comenzaron a indagar sobre las prótesis que necesitaría para caminar, aunque su estructura física recién estaría en condiciones en un par de años, explicaron.